Año del cuarenta y uno
diciembre por cierto mes
hubo una muerte en La Osada
un sábado veintitrés
Cuando Ezequiel llegó al baile
y les echó unas habladas
respétenme soy sus padre
agraristas de La Osada
Dios me encargó una cabeza
y aquí la traigo en mi vista
Esta noche se las mando
ha de ser de un agrarista
Anselmo sacó pistola
Ezequiel sacó la de él
Porque se le figuraba
que todo el mundo era de él
Cuado Ezequiel cayó al suelo
que ni las manos metía
toda la gente gritaba
que viva Anselmo García
agarraron el camino
iban con rumbo a Linares
con Ezequiel mal herido
sin saber sus familiares
Adiós caballo alazán
ya no te vuelvo a montar
Me llevan para Linares
me lleva a sepultar
Al pie de mi sepultura
yo mi pistola deseo
han matado a un pistolero
de la gente de Atadeo.